Músicas al vino. Selección enomusical (Primera Parte)

Dos semanas desde que escribí el último post han dado que pensar. No es que ahora, con el verano, haya estado tentada de aparcar el edificante, aunque costoso hábito de escribir, no. Es que para hablar de vino y música hacía falta una intensa labor de investigación previa. El resultado de ello ha sido tan extenso que lo serviremos en entregas.

Para este recorrido histórico musical por canciones inspiradas en el vino he recurrido a la memoria y, por supuesto, a Internet. ¡Ojo! este post no aspira a confeccionar una lista de grupos referentes (para eso, consultar otros blogs como Ligeros contratiempos que aborda ampliamente el tema). Mi selección es simplemente un »canto» al vino y a la vida.

La música y el vino están estrechamente vinculados

La música y el vino están estrechamente vinculados. Foto: Gabriel Sanz

Y como en la viña del Señor, en esta selección hemos encontrado un poco de todo: reservas, crianzas, vinos jóvenes y algo de vino en ‘tetra brick’.  No están escogidos por representar épocas, ni estilos. Tampoco por ser los que más nos gustan, ni los que menos. Pero sus letras y melodías apuntan al corazón, conectan con los sentimientos y despiertan nuestras emociones. Simplemente, música.

Como en el vino, con la música soy de gustos eclécticos. No me dejo guiar por modas, ni tendencias.  Me gusta cuando descubro nuevos matices de un vino que ya he probado, cuando de repente, un disco que no te cansas de oír te sorprende y te produce un escalofrío.  Por eso, para abrir este homenaje enomusical he recurrido a Javier Ruibal, un autor que sabe retratar como nadie los placeres de la vida.

La canción del gaditano ‘Vino y Besos’  nos deja bellas estrofas e inspira la nota de cata de ‘Beso de Vino’, que describimos a pie de página.

«Vino y besos y que se pare el reloj

Llena que llena el vaso de mi alegría.

Tu vinillo que me ha hecho,

por las uvas de tu pecho,

de ti me emborracharía….

(…)

Que me muera si no te quiero yo,

que me sé tu cuerpo entero de carrerilla,

El mapa de tus lunares,

Las vueltas que da tu pelo,

La forma de tu rodilla»

Con cierta similitud  a Javier Ruibal (tanto es así que tienen colaboraciones juntos) encontramos a La Canalla, un grupo que pone música a los bajos fondos de las pasiones… Y en ellos se basan sus letras. En su divertida canción ‘Dame vino y dime tonto‘ narra la particular historia de amor y vino entre una marquesa y un mendigo. Entre otras perlas, dicen así…

«Anda enrollate mi vida, tu me pagas la bebida yo te doy el corazón,

Luego méteme en tu cama, que si me faltan las ganas, me sobra imaginación

Quédate a vivir conmigo a la sombra del dobladillo de una loncha de jamón»

Viajamos hasta el otro lado del charco para hablar de una cantante que podemos calificar de añada joven, Lana del Rey. Nos guste o no, lo que sí se puede asegurar de ella es que es distinta a las demás. Sus composiciones ‘Born to die’ o ‘Video Games’ le han catapultado al éxito y la fama, pero como los buenos vinos, ha sabido mantener la esencia de su música. La recuperamos para nuestra selección por su versión del ‘Summer Wine’, canción que popularizó Nancy Sinatra en los años 60. Aquel dueto junto a Lee Hazlewood dejó un retrato onírico de la realidad de la época, alimentado muy probablemente por las sustancias estupefacientes que se consumían en aquella década. Y si no, ¡que alguien me explique el sentido de la letra!

«Cerezas, fresas y los ángeles un beso en la primavera,

mi vino de verano está hecho de todas esas cosas…»

Para los interesados, éste es el original de Nancy Sinatra.  El vídeo no tiene desperdicio.

En esta primera entrega enomusical hemos abordado la realidad desde dos puntos de vista opuestos: El mundanal y el onírico. ¿Cuál prefieres? El real o el de los sueños. Se admiten sugererencias.

… (continuará)

NOTA DE CATA:

Vino: Beso de Vino

Denominación de Origen: Cariñena (Aguarón)

Uvas: 85% Syrah, 15 % Garnacha

Grado de alcohol: 13,5 %

Cata: El vino Beso de Vino Selección 2009 es una mezcla de Syrah y Garnacha, criado durante tres meses en barrica de roble francés. Los aromas de las cerezas negras y de los arándanos producen un vino denso, elegante y lleno  de sabores que termina sin aristas. Bueno para su precio.